Hace tiempo, y sin poder adivinar cual era el color de su pensamiento, me regaló el cuento de "Los venenos" (¿seguirá siendo admiradora de Julito?) también me dijo que yo tenía abejas en la cabeza. Hace tiempo que no te encontraba y hoy, el azar me ha puesto en la casita roja. Y alegría encontrarte (dijera Benedetti en "Mucho más grave"). Que alegría saber de tí Leno, que alegría saber que sigues ilustrando. Ojalá algún día nos encontremos, pueda contarte sobre algunas ilustradoras y me dejes soñar con tus imágenes. Cordialemente, Jorge (el niño Jorge, aquel que alguna vez te encontró en...)
E Jorge! que gusto encontrarte por aquí, pues ahora vivo en el DF pero en 15 días voy a Morelia yo te aviso tengo un chorro de ganas de verte, espero estes muy bien, tengo muchas historias nuevas que contarte.
“El infierno de los vivos no es algo por venir; hay uno, el que ya existe aquí, el infierno que habitamos todos los días, que formamos esperando juntos. Hay dos maneras de no sufrirlo. La primera es fácil para muchos: aceptar el infierno y volverse parte de él hasta el punto de dejar de verlo. La segunda es arriesgada y exige atención y aprendizaje continuos: buscar y saber reconocer quien y que en medio del infierno, no es infierno, y hacer que dure y dejarle espacio”.
Las ciudades invisibles
Italo Calvino
Casi todas las imágenes que se publican en este blog son creaciones mías y están inspiradas en mi infancia.
A veces soy azul, a veces verde, a veces de menta y chocolate, y otras veces huelo a violeta. Sueno a campanitas y ha llegado a suceder que me salen alas en la espalda o rueditas en las patas. En mi habitación llueven gatos dorados por la noche y en los días nublados crecen ventanas en las paredes. Los niños, las nubes, los dulces, la vainilla, las estrellas, el mar y los conejos hacen brillar mi sangre. Trabajo haciendo burbujas para el viento, tengo un venado verde que habita en mi corazón y un árbol viejo y deshojado que florece blanco e ilumina la música del aire que me rodea.
2 comentarios:
Hace tiempo, y sin poder adivinar cual era el color de su pensamiento, me regaló el cuento de "Los venenos" (¿seguirá siendo admiradora de Julito?) también me dijo que yo tenía abejas en la cabeza. Hace tiempo que no te encontraba y hoy, el azar me ha puesto en la casita roja. Y alegría encontrarte (dijera Benedetti en "Mucho más grave"). Que alegría saber de tí Leno, que alegría saber que sigues ilustrando. Ojalá algún día nos encontremos, pueda contarte sobre algunas ilustradoras y me dejes soñar con tus imágenes. Cordialemente, Jorge (el niño Jorge, aquel que alguna vez te encontró en...)
E Jorge! que gusto encontrarte por aquí, pues ahora vivo en el DF pero en 15 días voy a Morelia yo te aviso tengo un chorro de ganas de verte, espero estes muy bien, tengo muchas historias nuevas que contarte.
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